Las motos que circulan por la ciudad de Buenos Aires a partir de esta semana deben imprimirle a sus partes un grabado solicitado por la autoridad competente. Para vehículos en general el trámite sufrió un incremento del 33%. El costo saltó de $ 3.000 a $ 4.000 y en motos se abona la mitad, $ 2.000.

El incremento fue aprobado a través de una resolución del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, publicada en el Boletín Oficial porteño. En el texto se explica que es por el aumento del valor de la Unidad Fija que también se usa para calcular el monto de las multas, que en marzo pasó de $53 a $ 58,37.

El grabado de autopartes es una gestión que se realiza por única vez y cuyo objetivo es desalentar el robo de vehículos para su desguace. Hay que ir a un taller donde graban la patente en las puertas, el capot y el baúl del vehículo. Y si es un coche de dos puertas, en el parante de la puerta delantera.

En el caso de que un siniestro obligue a cambiar alguna de las piezas grabadas, la autoparte afectada se vuelve a grabar sin costo.

El 17 de agosto del año pasado, una resolución extendió la obligación del grabado a los motovehículos. Y en la nueva resolución, finalmente, se fijó en $ 2.000 la tarifa que deberán pagar, que ya estaba prevista como la mitad de la que se abona para los automotores.

En el caso de las motos, las letras y los números del dominio deberán ser grabados en al menos cuatro de las siguientes partes: el caño de escape, la parte inferior del asiento, el cuadro, la horquilla y el soporte de pedalín o trípode. El encargado de realizar el trabajo deberá dejar constancia de en qué partes lo hizo en el formulario del trámite.

La Ciudad realiza controles en los comercios que venden autopartes. El grabado es una medida para evitar los robos de vehículos para su posterior desguace..

El grabado de autopartes fue impuesto por la ley 3.708, que creó el Registro de Verificación de Autopartes dentro de la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana. Fue implementado para evitar el robo de vehículos para su desguace y venta de piezas. También para regularizar la actividad de los comercios que venden autopartes, que deben anotarse en el registro.

Desde 2011, cuando se impuso su obligatoriedad, hasta diciembre pasado fueron grabados 1.159.860 de los 1.500.000 automotores radicados en la Ciudad. Es decir que el 77% cumplió con el trámite. En lo que va del año, se sumaron otros 75.700 grabados.

El grabado debe ser realizado por los dueños de autos y de motos nuevos y usados radicados en la Ciudad. Es un requisito obligatorio para pasar la Verificación Técnica Vehicular (VTV) o para realizar la transferencia de un vehículo. Además, es indispensable para salir a la ruta.

La multa por no tener grabadas las partes del vehículo, que se cobra desde 2016, es de 150 Unidades Fijas. Al valor actual, esto equivale a $ 8.755,50.

​Para hacer el grabado de autopartes hay que pedir un turno vía web para ir a uno de los talleres autorizados. El día de la cita, el dueño del vehículo o una persona autorizada por este debe presentarse con la documentación del automotor y la personal (título de propiedad o cédula verde/azul y DNI).

Completar el trámite toma unos 20 minutos, entre la parte administrativa y el grabado propiamente dicho. Este último se hace con una pistola electromecánica, que realiza un micro punzado inviolable que marca las autopartes en forma indeleble. Además, se coloca un sticker en la parte trasera del vehículo que indica que se encuentra grabado.

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